No cabe duda que la crisis generada por el COVID-19 ha supuesto un repulsivo en nuestra manera de socializarnos. El trabajo y el estudio tampoco han permanecido ajenos a esta tesitura. El teletrabajo en 2020 se antoja, por fin, como una manera más de poder desempeñar unas tareas que tradicionalmente se han realizado en oficina. ¿Ha llegado el momento del cambio?
La necesidad de legislar el teletrabajo
La Ley del Trabajo a Distancia, con forma de Real Decreto-ley 28/2020, de 22 de septiembre, es por fin una realidad desde septiembre. El acuerdo entre gobierno, sindicatos y empresarios ha conseguido poner legalidad a una actividad que no estaba correctamente regulada. Y no podemos poner puertas al campo, actualmente se desempeñan muchos trabajos en presencialidad que bien pudieran hacerse de forma remota.
Esta legislación viene a poner orden en un tipo de trabajo que ha terminado de dar el salto debido al confinamiento de marzo.Y no nos engañemos, si vivimos en una sociedad digital hemos de apostar por ello de manera clara. La ley puede que tenga sus lagunas, pero al menos ya hay algo a lo que podamos aferrarnos.
Ahora bien, lejos de toda ley y formalidad, el teletrabajo no deja de ser un ejercicio duro. Trabajar a distancia no es para nada pan comido, y hay muchos perfiles de trabajadores que no llevan nada bien este tipo de empleo. Si es tu caso y sí o sí has de teletrabajar, hemos elaborado una lista de trucos para aumentar tu eficiencia, así como otra de cosas que has de evitar.
Teletrabajo en 2020: trucos para ser eficiente
- Debes ser tremendamente disciplinado. El teletrabajo quizás te libere de la presión d tener al jefe en la mesa de atrás o respirándote en el cogote, pero no vale con ir a tu ritmo y ponerte a trabajar cuando te plazca. Has de cumplir un horario tan escrupuloso como si fueras a la oficina.
- Crea un espacio de trabajo agradable. Teletrabajar no es plantar el portátil en la mesa del salón con los platos del desayuno sin recoger. Ubícate en un lugar en el que estés cómodo, lejos de toda distracción y a ser posible, con luz natural. Utiliza una buena silla ergonómica y establece pausas en el trabajo cada 50 minutos. Un breve paseo por el pasillo suele ser un aliciente interesante que ayuda a recobrar el brío.
- Márcate un horario de trabajo. No postergues las tareas para más tarde, y mucho menos para la noche. Busca tu espacio en el tiempo para poder desempeñar tu tarea y no lo alargues de forma innecesaria.
Lo que debes evitar al teletrabajar
- Nada de trabajar en pijama. Aunque pueda parecer una broma, se trata de tu trabajo y en cualquier momento puedes tener que realizar una videollamada. Aséate, ponte ropa cómoda, pero no por ello demasiado informal, y dale la importancia que tiene al trabajo.
- La productividad va a caer en picado si tienes abiertas tus redes sociales, juegos en línea o cualquier elemento que te distraiga. Aplícalo a tu mesa, fuera todo lo que te aparte de la concentración.
- No analizar nuestro entorno. Puede que estañes usando un ordenador anticuado, que la pantalla no se vea bien, que la impresora se atasque o que el Wi-Fi no se reciba adecuadamente. Merece la pena corregir estos fallos, piensa que es tú trabajo. Todo lo que no ayude, o lo que consiga retardarte, ha de ser corregido.
En definitiva, a pesar de la reciente Ley del Trabajo a Distancia, debemos grabar en nuestro ADN la importancia que supone teletrabajar. Evitemos hacerlo de aquella manera y dotarle de la consideración que merece. El teletrabajo en 2020 ha llegado para no irse jamás.